Una alianza formada por Claro, TIM y Telefónica (propietaria de Vivo), ofreció Oi Móvel por R$ 16,5 mil millones en una subasta que fue aprobada este lunes (31) por la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel). A partir de ahora, las tres telefónicas compartirán la gestión de la telecom de Río que estaba en proceso de recuperación judicial.
Dominio de líneas celulares
Actualmente, alrededor del 80% de las redes celulares móviles son administradas por Claro, Tim y Vivo. Oi poseía el 16% del mercado. Con la aprobación de Anatel, los tres ahora tendrán más del 96% de las líneas.
Dentro de la aprobación, Anatel exigió el cumplimiento de varios requisitos por parte de los tres operadores, principalmente en relación con la Ley del Consumidor.
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Vea lo que Claro, TIM y Vivo deben ofrecer a los consumidores
Dentro del cronograma acordado con Anatel, los tres operadores celulares se comprometieron a crear un plan de unificación y un cronograma referente al proceso de migración de números.
Para ello, crearán canales de comunicación para atender las consultas de los consumidores, abriendo así el derecho a elegir planes y servicios iguales o similares a los ofrecidos por Oi. Asimismo, se prevé el respeto al derecho a la privacidad y portabilidad de los datos en todo momento.
La migración automática de fidelización o el cobro de cargos contractuales están prohibidos por Anatel debido al incumplimiento de contrato por parte de los usuarios de los productos de Oi Móvel, que incluye bos. Las empresas deben adherirse a las siguientes modificaciones:
- presentar un plan de transferencia de los números de teléfonos celulares de Oi;
- estar al día con las autoridades fiscales estatales, municipales y federales;
- terminar, dentro de 18 meses, superposiciones de frecuencia;
- presentación de promesas que permitan cumplir con las metas del Plan General de Servicio Universal en el sector;
- presentación de garantías referentes al alcance de promesas pendientes de cumplimiento.
Comprender el proceso de quiebra
La venta de Oi Móvel se cerró en diciembre de 2020 en una subasta que formaba parte del proceso de recuperación judicial de la operadora. El valor fue fijado en R$ 16,5 mil millones.
Los recursos adquiridos serán utilizados por Oi para pagar deudas, que suman más de R$ 65 mil millones. A pesar de la aprobación de Anatel, el proceso aún debe ser aprobado por el Consejo Administrativo de Defensa Económica (Cade).
Vía: O Globo
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